Hace tiempo leí en un tweet que se hizo famoso por sus predicciones a largo plazo que se cumplían, que los principales gobiernos del mundo eran conscientes de la existencia de otras civilizaciones extraterrestres y que nos iban a ir preparando progresivamente para darnos la noticia.
Esto no quiere decir que tengamos en la Tierra a organismos inteligentes conviviendo con nosotros, como tantas veces se ha fantaseado en la Ciencia Ficción, pero si que hubiera maquinaria, naves o sondas exploradoras que hubieran llegado a nuestro planeta enviadas hace millones de años desde otros planetas habitados. Algunos aventura que inclusos podrían ser obra de alguna Inteligencia Artificial extraterrestre, en cualquier caso, empiezan a aparecer numerosas referencias solventes.
De cualquier modo, lo que si es cierto es que últimamente se suceden una serie de noticias, que podríamos denominar «serias», publicadas por medios de comunicación u organismos solventes que me llaman la atención y quiero compartir en mi blog.
Noticias relacionadas con civilizaciones extraterrestres
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Declaraciones en el Congreso de los Estados Unidos
En julio de 2023, tres militares han testificado bajo juramento ante el Congreso de los Estados Unidos. Este es un resumen de su intervención (Ver hilo de Tweets).
Revelaciones Impactantes en el Congreso sobre UAPs Sugerirían Contacto con Inteligencias No Humanas
En una reciente comparecencia ante el Congreso de los Estados Unidos, un panel de militares de alto rango ha ofrecido testimonios que podrían ampliar significativamente nuestra comprensión de los fenómenos aéreos no identificados (UAPs) y su posible conexión con civilizaciones no terrestres. Los detalles proporcionados en esta sesión, según los tweets del periodista Carlos Sánchez, revelan preocupaciones de seguridad nacional y aluden a encuentros con tecnologías más allá de nuestra comprensión actual.
Un Asunto de Seguridad Nacional
Durante la sesión, uno de los militares, identificado como Ogles, fue interrogado sobre si los UAPs representan una amenaza para la seguridad nacional de los Estados Unidos. La respuesta fue unánime y preocupante: «Potencialmente». Cuando se les preguntó sobre la capacidad de defensa ante una acción hostil de estos objetos, la respuesta fue clara: no estamos preparados para defendernos contra ellos.
Además, se abordó el interés particular de estos UAPs por nuestras instalaciones de energía nuclear. Esta revelación, aunque no detallada, sugiere una posible atracción de estas inteligencias hacia nuestras fuentes de energía más poderosas y, potencialmente, más peligrosas.
Los Peligros de la Ingeniería Inversa
Otro aspecto destacado en los tweets es el testimonio de un militar llamado Grusch, quien confirmó que hay individuos que han sufrido daños mientras intentaban realizar ingeniería inversa a tecnologías recuperadas de estos UAPs. Aunque no se proporcionaron detalles específicos, la mención de «muchas cosas pueden salir mal» implica los enormes riesgos y el desconocimiento que enfrentamos ante tal tecnología avanzada.
Grusch también confirmó la existencia de programas de ingeniería inversa de aeronaves no terrestres y mencionó que existen individuos dispuestos a testificar sobre sus experiencias, siempre y cuando se les garantice protección contra represalias.
Un Enfoque Cauteloso sobre el Origen
Una de las declaraciones más intrigantes fue la preferencia de Grusch por usar el término «inteligencia no humana» en lugar de «inteligencia extraterrestre». Esto refleja un enfoque cauteloso y abierto respecto al origen de estos fenómenos, indicando que la verdadera naturaleza de los UAPs podría ser más compleja y multifacética de lo que la simple etiqueta de «extraterrestre» podría sugerir.
Implicaciones para la Humanidad
La información revelada en esta comparecencia plantea preguntas fundamentales sobre nuestra posición en el universo y la posibilidad de civilizaciones avanzadas con tecnologías que desafían nuestra actual comprensión científica. Además, subraya la necesidad urgente de una estrategia de defensa mejorada y una política de transparencia que permita a investigadores y al público en general comprender mejor y prepararse para estos fenómenos inexplicables.
Estos testimonios no solo añaden una capa profunda de misterio y urgencia a la discusión sobre UAPs, sino que también podrían marcar un punto de inflexión en cómo la humanidad percibe su lugar en el cosmos y cómo se prepara para futuros encuentros con inteligencias no humanas.
¿Qué son las Esferas Dyson?
Las esferas Dyson son una hipótesis teórica relacionada con civilizaciones extraterrestres avanzadas y su capacidad para captar y utilizar energía. Propuesta por el físico y matemático Freeman Dyson en 1960, esta idea se basa en la suposición de que una civilización muy avanzada tecnológicamente necesitaría cantidades masivas de energía para mantener su desarrollo y expansión.
En esencia, una esfera Dyson es una estructura hipotética que rodea completamente a una estrella, capturando la mayor parte o toda su energía emitida. Existen varias formas propuestas de estas esferas, desde un enjambre de satélites solares orbitando alrededor de la estrella (conocido como «enjambre Dyson») hasta una cáscara sólida (aunque menos plausible debido a problemas de estabilidad y material).
La relevancia de las esferas Dyson en el contexto de civilizaciones extraterrestres radica en la escala de desarrollo tecnológico que implican. Según la Escala de Kardashov, una clasificación de civilizaciones basada en su consumo energético, una civilización de Tipo II sería capaz de aprovechar la energía total de su estrella, lo que podría lograrse mediante una esfera Dyson.
Buscar señales de esferas Dyson en el cosmos es una estrategia en la búsqueda de inteligencia extraterrestre (SETI). Esto se debe a que una estructura tan masiva podría emitir patrones detectables de radiación infrarroja, resultado de la conversión de energía estelar en formas útiles de energía y disipación de calor.
Las esferas Dyson no solo representan un ejercicio teórico sobre los límites de la ingeniería y la energía, sino que también reflejan la capacidad imaginativa de la humanidad al considerar cómo otras civilizaciones podrían alcanzar niveles de desarrollo inimaginables.
El caso de la estrella de Tabby
La Estrella de Tabby, también conocida como KIC 8462852, es una estrella ubicada a aproximadamente 1,470 años luz de la Tierra en la constelación de Cygnus. Lo que hace a esta estrella particularmente interesante es su comportamiento inusual en cuanto a la variación de su brillo. Fue descubierta y analizada por primera vez en el contexto del programa Kepler de la NASA, que busca exoplanetas a través de la observación de las caídas de brillo de las estrellas que podrían ser causadas por planetas en tránsito.
Comportamiento Anómalo
KIC 8462852 muestra caídas de brillo extremadamente inusuales y erráticas. A diferencia de las caídas de brillo regulares y predecibles que se observan cuando un planeta transita una estrella, las disminuciones de brillo en la Estrella de Tabby son irregulares tanto en profundidad como en duración, y no siguen un patrón repetitivo claro.
Hipótesis sobre las Caídas de Brillo
Las posibles explicaciones para este comportamiento anómalo incluyen:
- Nube de Cometas: Una gran nube de cometas o escombros que orbita la estrella podría causar las caídas irregulares en el brillo.
- Fragmentación Planetaria: La desintegración de un planeta o varios cuerpos más pequeños también podría producir este efecto.
- Material Circumestelar: Material en órbita alrededor de la estrella podría bloquear la luz de manera irregular.
- Oscurecimiento Intrínseco: Cambios dentro de la estrella misma que afectan su brillo.
Relación con las Esferas de Dyson
Una de las explicaciones más intrigantes y especulativas para el comportamiento de la Estrella de Tabby es la posibilidad de que esté rodeada por una estructura construida por una civilización avanzada, conocida como una Esfera de Dyson. Aunque la versión clásica es una esfera sólida, las versiones más realistas incluyen enjambres de satélites u otros dispositivos en órbitas coordinadas que colectivamente capturan energía solar.
Si una civilización estuviera construyendo o hubiese construido tal estructura alrededor de la Estrella de Tabby, podría explicar las variaciones irregulares en el brillo de la estrella. Sin embargo, esta hipótesis es especulativa y aún no hay evidencia concreta que la respalde.
Visualización de la Estrella de Tabby
Puedes visualizar la Estrella de Tabby en varios sitios de astronomía en línea. Aquí tienes dos recursos útiles:
- NASA Astrobiology: Este sitio ofrece una visión general y actualizaciones sobre la Estrella de Tabby, incluyendo imágenes y análisis recientes de su comportamiento inusual. Puedes explorar más en su sección dedicada a la Estrella de Tabby (NASA Astrobiology).
- JPL de NASA: En el sitio del Laboratorio de Propulsión a Chorro (JPL) de NASA, encontrarás información sobre las investigaciones más recientes y las teorías que intentan explicar el comportamiento de esta estrella. Puedes acceder a más detalles en su página específica sobre la diminución misteriosa de la Estrella de Tabby (NASA Jet Propulsion Laboratory (JPL)).
La Estrella de Tabby sigue siendo objeto de investigación y debate dentro de la comunidad astronómica. Las explicaciones más prosaicas, como nubes de cometas o fragmentación de cuerpos celestes, son actualmente más aceptadas, pero la posibilidad de una estructura artificial como una Esfera de Dyson mantiene el interés popular y científico debido a las implicaciones que tendría para la búsqueda de inteligencia extraterrestre.
La observación continua y futura de KIC 8462852, así como la búsqueda de estrellas con comportamientos similares, ayudará a arrojar más luz sobre estas intrigantes anomalías.
Proyecto Hephaistos
El Proyecto Hephaistos, o Proyecto Hefesto, una iniciativa cuyo objetivo es buscar firmas de astroingeniería como las conocidas esferas Dyson. Hefesto era hijo del rey de los dioses, Zeus y era el dios del fuego, de los herreros, la mampostería de piedra, las forjas y el arte de escultura. Entre sus obras más famosas se encuentra la armadura de Aquiles, que fabricó durante la guerra de Troya.
Crear una esfera Dyson no es algo sencillo y sería imposible para la ingeniería y la tecnología actuales. Una civilización sólo podría construir algo tan masivo y complejo si hubiera alcanzado el Nivel II en la Escala Kardashev.
El Proyecto Hefesto está financiado por la fundación Magnus Bergvall y Nordenskjöldska Swedishborgsfonden. Su objetivo es encontrar firmas de tecnología extraterrestre en vez de señales directas. Pero claro, encontrar una estrella de este tipo utilizando los datos proyectos de observación de estrellas, como el satélite Gaia, el Wide-Field Infrarrojo Survey Explore (WASE) y el Two Micron All Sky Survey (2MASS), es una tarea mucho más que complicada, pero no por ello imposible de intentar. Se han encontrado unos pocos candidatos, tal y como se explica en las tres investigaciones publicadas en la revista Monthly Notices of the Royal Astronomical Society. De cinco millones de estrellas situadas a una distancia de hasta 6.500 años luz se encontraron 60 posibles estrellas candidatas.
El segundo estudio del Proyecto Hephaistos se centró en la detección de esferas Dyson casi completas utilizando datos de la misión espacial Gaia y el estudio RAVE, encontrando 53 estrellas candidatas con un exceso de mediciones en el infrarrojo medio. Se debe tener en cuenta que podría ser que estas ‘tecnofirmas’ provengan de los discos de desechos extremos que se forman después de una colisión planetaria.
El tercer estudio explora la posibilidad de encontrar esferas Dyson parciales mediante el análisis de grandes catálogos astronómicos con los datos de estudios infrarrojos como el Wide-field Infrared Survey Explorer (WISE) y el Two Micron All Sky Survey (2MASS) que detectan emisiones térmicas de objetos, unos datos que son cruciales para identificar posibles esferas Dyson. Los resultados fueron cuanto menos sorprendentes: menos de 1 de cada 50.000 estrellas dentro de 100 pársecs de la Tierra podrían albergar esferas de Dyson que estén completas al 90% y funcionen a una temperatura efectiva de 300 K.
