Interesante y muy recomendable artículo en El Confidencial sobre la repercusión del factor de la edad como un factor clave en las próximas elecciones generales.
Estos son los factores podemos destacar de este interesante artículo:
- Mas de 11,5 millones de electores tendrán 60 o más años y más 1,5 millones tendrán 85 o más. Eso hace que la seguridad y las pensiones sean un factor importantísimo. Son 6 millones más que los que había en las primeras elecciones de 1977.
- En 1997 la edad media de los españoles se situaba en 33,4 años, ahora ha escalado hasta los 42,5 años, y con una clara tendencia a aumentar
- El número de nuevos electores respecto al 2011 será de 1,58 millones, el valor más bajo de las historia de la democracia.
- Un gran número de electores de menos de 30 años han emigrado fuera de España con lo cual su participación se reduce ostensiblemente.
- El voto joven residente en grandes núcleos urbanos tiene mayor simpatía electoral por los partidos emergentes -Ciudadanos y Podemos- o Izquierda Unida y UPyD, mientras que, por el contrario, los partidos tradicionales -Partido Popular y PSOE- tienen su mayor caladero de votos en ciudades más pequeñas con edad media más elevada.
- El reflejo de la edad a la hora de votar también se muestra con claridad en relación al nivel de participación electoral. Los jóvenes tienden más que los mayores a abstenerse, y eso también determina el resultado electoral.
- Los más jóvenes -con mucha mayor actividad en las redes sociales– apenas representan el 8,2% del censo electoral. Solo el 14,5% de los electores tiene menos de 30 años.
Este dato debe ser tenido muy en cuenta por los expertos en comunicación política a la hora de diseñar las campañas electorales y a la hora de elaborar los mensajes políticos.
Envejecimiento y decisión de voto
El envejecimiento de la población es un fenómeno demográfico que tiene un impacto significativo en las tendencias de voto y las preferencias políticas. A medida que la población envejece, aumenta la proporción de votantes de mayor edad, lo que puede influir en las elecciones políticas y en la popularidad de las propuestas de derecha o izquierda.
En términos generales, se ha observado que los votantes mayores tienden a ser más conservadores en sus opiniones políticas y, por lo tanto, pueden estar más inclinados a apoyar partidos de derecha, que a menudo enfatizan la seguridad, la tradición y la estabilidad. Estos partidos suelen promover políticas relacionadas con la seguridad social, la atención médica y las pensiones, aspectos que afectan directamente a los ciudadanos de mayor edad.
Por otro lado, los votantes más jóvenes, que constituyen una menor proporción del electorado en sociedades que envejecen, tienden a ser más progresistas o de izquierda, apoyando cambios sociales, ambientales y económicos. Sin embargo, con el envejecimiento poblacional, su influencia en las elecciones puede disminuir, lo que podría llevar a un desplazamiento general hacia políticas más conservadoras.
Los estudios sobre este tema sugieren que el envejecimiento poblacional puede resultar en cambios en las políticas gubernamentales, priorizando temas que son de particular importancia para los votantes mayores, como la salud y las pensiones, sobre otros temas que pueden ser más relevantes para las generaciones más jóvenes, como la educación y el empleo.
Un estudio relevante en este campo es «Ageing and the politics of demographic alarm» publicado en la revista Population Studies, que explora cómo el envejecimiento poblacional puede influir en la retórica política y las políticas públicas. Este estudio indica que el envejecimiento de la población puede llevar a un mayor enfoque en políticas que atienden las necesidades de los mayores, afectando la distribución de recursos entre diferentes grupos etarios y sectores políticos.
Recomiendo la lectura de este trabajo, El envejecimiento de la democracia: efectos demográficos, legitimidad política y la búsqueda del pluralismo generacional, publicado por la Universidad de Cambridge.